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Historia

Eligió cocinar

¿Le gustaría inculcar a sus hijos un amor por el aprendizaje para toda la vida? Lea cómo Susan superó sus demonios internos para ayudar a su hijo a explorar sus intereses.

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Al animar a nuestros hijos a explorar lo que les interesa, los padres les ayudan a encontrar su propósito.

“El colegio comunitario local tiene un programa Saturday Kids to Kollege. Ofrecen clases para niños de 5 a 14 años. Miré el catálogo con mi hijo. Pensé que elegiría la robótica, la química diminuta o la construcción de Lego. Eligió cocinar.

Tuve que luchar contra mis demonios internos diciéndome, 'eso es para chicas', pero lo inscribí. En realidad, más de la mitad de la clase eran chicos. Aprendieron a hacer tacos (agregando chocolate amargo para realzar el sabor), sopa de pollo con fideos, pizza y popovers (que, aparentemente, eran los favoritos de Winnie the Pooh). Mi hijo estaba explorando uno de sus ING: cocinar. Y esto es lo que realmente aprendió junto con el amor por preparar la comida: cómo medir las cosas húmedas y secas (hay una diferencia), cómo planificar una comida, cómo dividir la comida en porciones.

En nuestras caminatas diarias por el vecindario, pasamos por un restaurante vacío y durante semanas contempló alquilar el lugar. Habló sobre el menú, los clientes que quería atraer y las recetas que probaría. Esta exposición de seis semanas a una simple clase de cocina despertó una verdadera pasión por mi hijo. El pasado Día de Acción de Gracias fue él quien preparó la comida para la familia ”.

- Susan en San Francisco, California